Durante todo este tiempo de enseñanza a distancia, recibimos y enviamos cientos de hojas en forma de fotos, con los trabajos de los chicos. Seguramente a más de uno le habrá sucedido que se le comenzaron a mezclar todas las hojas.
Para evitar esta situación y así tener organizadas las carpetas de nuestros estudiantes, diseñé un simple método que los puede ayudar. Está pensado para el uso con la computadora. Consiste en una serie de pasos.
PASO 1
Creamos carpetas con el nombre de cada estudiante:

PASO 2
Descargamos todos los archivos desde los distintos canales de comunicación (Whats App, Mail, otros), siempre a las mismas carpetas.
¡Atención!
NUNCA cambiarle el nombre a los archivos. De este modo, cuando en un futuro un estudiante nos envíe otro trabajo, veremos que si lo descargamos en la carpeta y tiene un (1), quiere decir que ya lo habremos descargado antes, porque el nombre del fichero coincidirá. Este valioso consejo nos ahorrará descargar (y quizás corregir) dos veces un mismo archivo.
En la siguiente imagen, podemos ver esta eventualidad:

PASO 3
Descargamos el programa RAINBOW FOLDER desde este link. Es completamente gratuito. Esta aplicación nos permitirá colorear las carpetas para saber cuáles fueron las que ya corregimos.
Para comenzar a usarlo hacemos clic derecho sobre cualquiera de las carpetas y del menú contextual, elegimos RAINBOW FOLDERS:

PASO 4
Indicaciones Express:
1 – Seleccionamos la o las carpeta/s.
2 – Elegimos el color.
3- Cliqueamos en colorear.
Si tenemos una carpeta que coloreamos con anterioridad, fácilmente podemos quitarles el color con el botón correspondiente.

PASO 5
Vemos que las carpetas se encuentran coloreadas, pudiendo a primera vista saber cuáles fueron corregidas y cuáles faltan.
Es importante tener en cuenta que quizás los cambios de color no se aplican en el momento; bastará esperar unos instantes o abrir y cerrar la ventana para que los cambios surtan efecto.
¿Qué podemos hacer cuando terminamos de corregir todas las carpetas y queremos volver a empezar con la lista? Lo que podemos hacer, es ir cambiando nuevamente el color o dejarlas con el predeterminado (amarillo).
Las hojas nuevas que van llegando, para que no se mezclen con las que ya corregimos, las podemos poner en una subcarpeta (dentro de la carpeta de cada alumno/a) llamada «nuevas». Así, una vez que tenemos listas las hojas, las sacamos de ahí, las ponemos en la carpeta principal y borramos «nuevas». Así sabemos rápidamente al entrar si hay hojas sin revisar.

¿Qué te pareció este sistema para organizar las hojas de tus estudiantes?
¡Te invito a dejar tus comentarios!